domingo, 3 de enero de 2010

141º paso - Año pasado (por agua) y Año nuevo

Es domingo y vuelve a llover, vaya vacaciones que estamos tirando, pero el agua siempre es buena, pero como todo, con moderación. El día 31 al menos el tiempo nos dió un respiro, y aunque Jose no quiso salir conmigo por la mañana, por la tarde, que pasó mirando la ventana cada 5 minutos, convencí a David para salir un rato a dar una vuelta, aprovechando que él no tenía que varear aceitunas, Jose sin embargo, vio que aunque por un momento hizo sol lo más probable es que volviese a llover y después de vestirse se volvió a cambiar y no se vino con nosotros. El problema sue la hora de salida, las 16:30 de la tarde, sobre todo porque ahora anochece antes, pero aún así salimos y nos fuimos al pinar.

Aquello estaba encharcadísimo por todos lados, pero eso era lo mejor, sin saber por donde ir para no hacer una ruta demasiado largo empezamos a pedalear por donde el otro día, esta vez sin que salieran los dichosos perros. El hecho de bicicletear por la tarde después de haber comido una buen plato de carillas con arroz me hizo pensar. Voy a patentar unas nuevas barritas energéticas elaboradas con carillas, o cualquier otra legumbre, así puedo hacer sabor lentejas o sabor garbanzos, en incluso meterle el regustillo de chorizo para que repita todo el camino. Bueno, después de comer bien se nota la fuerza, no me cansaba y apretaba más que ningún día, claro que aunque físicamente uno esta bien la rodilla lo nota, en próximas comidas voy a tener que meter oreja que tiene cartilago a ver que pasa.

El pinar estaba... creo que no voy a volver a usar la palabra precioso... mmm espectacular con sus numerosos charcos, algunos los bordeabamos por donde podíamos, en otros que parecían someros se clavaba la bici y David metió la pata, en otra zona encharcada yo que iba despacio hice frenar a David y sacó la pierna que no es para apoyarse, es decir, boom, al suelo. Y en zonas llanas con el camino en condiciones nos adelantabamos para meternos en charcos y salpicar al otro. Pero se hacía de noche y... como no, empezó a llover, menos mal que era al final y casi nos pilló en el cruce de Valcaliente, asi que chubasquero puesto y para casa, donde llegamos un poco mojados pero, al menos yo, contento por haber montado el último día del año: 25 km. en 125 minutos.

El día 1 tocó descansar, es otro buena forma de empezar el año, pero eso si, el 2 que no parecía que fuese a llover no podía uno saltarselo, asi que a las 8 me levanté y quedé con Jose, Alfonso no se atrevió porque pensabamos ir a Garganta la Olla por caminos, pero al final, viendo el nubarrón que había encima de esos pueblos decidimos variar la ruta.

Nos bajamos despacito hasta el pinar, y es que a las 9 de la mañana hace mucho frío, y se nota el cambio de temperatura cuando no llueve, que baja bastante. Allí fuímos por cualquiera de los cientos de caminos que hay, yo no se por donde, pero eso si, no era por donde fuí "el año pasado", esta vez era más a la izquierda, pasando por fincas con peeros más grandes, vacas, caballos, y la flora característica, daban ganas de parar y hacer miles de fotos, pero no era plan, habrá que ir un día exclusivamente a hacer fotos.

Del pinar cruzamos por la carretera entre la cuesta de Torreseca y el cruce de Robledillo, y seguimos campo a través hasta llegar al Robleo, donde seguimos por el canal hasta el chiringuito de M., para después meternos por otros caminos, por la parte antigua del Robleo y cruzar la carretera (no se decir a que altura exactamente) y seguirla en paralelo campo a través de nuevo, haciendo nosotros el camino.

Así llegamos al cruce de la cantina para dirigirnos al miniTourmalet, pero esta vez no le subimos por carretera, solo el primer tramo hasta llegar a un camino paralelo que lleva a fincas, una cuesta de unos 3 kilometros con tramos más empinados que la cuesta que sube a la fuente de lo hermanos, mientras yo me acordaba de las carillas y las nuevas barritas que tenía que inventar, porque tuve 3 momentos de bajón, en los que me quería bajar de la bici, pero uno es cabezón y sabe que al terminar te sientes mejor si consgues el objetivo. De hecho Jose se bajó un par de veces, jeje, pero era para esperarme... yo metí el molinillo y hasta el final, donde si que me comí el muesly mientras Jose se comía su abituallamiento favorito, unos higos.

Paramos en la fuente donde tengo una foto con los cabestrillos en el paso 125, y por supuesto que nos hicimos una. Desde allí nos dirigimos a Talaveruela, subiendo por la calzada romana y disfrutando del paisaje. Al llegar allí nos fuímos al pueblo de Valverde, entrenador ahora del Villa-real y desde allí nos fuímos hasta la garganta Cuartos, haciendo el camino contrario al que hicimos cuando Alfonso partió la cadena, recorriendo el tramo que más me gusta de todos los que he hecho por LaVera, esa calle con sus muros de piedras a los lados, ahora llena de hojas secas (aunque verdaderamente estaban mojadas) y que según la hora y el sol la luz es (preciosa no)...

Bajamos al puente de Cuartos donde hicimos alguna otro fotillo, el agua venía limpia pero con menos caudal que el otro día, y desde allí nos fuímos al pueblo por el camino de los lomos, que recuerdo que hacía años me costaba subir, y ahora también, pero después de subir el minitourmalet no se me hizo tan duro, aunque claro, quedaba la cuesta que sube de la piscina para terminar los 40 km de la ruta en 3 horas, digo para terminar en el Pilón tomando una bota de cerveza con limón, sino no podría empezar bien el año.

Asi que feliz año a todos, y ya que no he cumplido los objetivos que me marqué el año pasado y analizaré en otro paso, para este solo pido salud para hacer lo que me proponga, y como no, poder subir al Berezo el 15 de Agosto y mejorar mi tiempo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario