Vaya diíta para montar en bici elegimos... Fue el lunes, al salir de trabajar me cruzo con Isra, un compañero de trabajo que venía de haberse hecho una ruta el sábado de 96 km. entre Villalba y Ávila por montaña, en la que echó más de 6 horas y de la que venía reventado pero con ganas de estirar un poco las piernas montando en bici, asi que al salir de trabajar nos pusimos el "traje de los domingos" y a dar pedales.
Pero hacía mucho viento, era muy molesto, en llano, donde el otro día iba a unos 20 km/h, no podíamos pasar de los 13, y fue donde entendí el dicho: "las palabras se las lleva el viento". No nos oíamos lo que decíamos circulando en paralelo, casi manillar con manillar. Si llego a ir solo me hubiera dado la vuelta en el primer alto, pero para una vez que tengo compañia y me va a enseñar la zona...


Una vez en Daganzo y viendo la hora decidimos volver al pueblo por carretera que no es nada, para completar así 34 km en 2 horas y 5 minutos.
El resto de días hasta hoy: las clases de magia, hoy la piscina del cole y ayer el gimnasio. Si, me he apuntado al gimnasio porque no entiendo como cuidando la alimentación bastante he ganado peso, asi que me he propuesto además de sudar, fortalecer las piernas y perder peso haciendo otro tipo de ejercicio a ver si es posible que pueda volver a correr, aunque sea un poco, aprovechando que por aquí hay mucha tierra para pisar sin que se resienta mucho la rodilla. Además, hay una cinta andadora que amortigua y creo que si todo va bien empezaré por ahí, pero aún es pronto para decirlo, son ilusiones. Eso si, costando 14€ al mes ¿quién no se apuntaría?
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